Hacer un curso de inglés en el extranjero no sólo te permite aprender un idioma sino visitar zonas del mundo que te llenarán de riqueza cultural y te aportarán una experiencia única. Por ejemplo, Toronto es una ciudad canadiense que brinda la oportunidad de observar de cerca uno de los espectáculos naturales más bellos del mundo: las Cataratas del Niágara.
A todos nos puede sonar el nombre y enseguida nos hacemos una imagen en nuestra cabeza de lo que son, pero ¿Qué sabemos realmente de estas cataratas?
Este potente torrente de agua está formado por un grupo de cascadas situadas en el Río Niágara en la zona oriental de América del Norte, entre la frontera entre los Estados Unidos y Canadá. Están situadas a 236 metros sobre el nivel del mar y tienen una caída de 52 metros. Las Cataratas del Niágara están formadas por tres cataratas diferentes: las cataratas canadienses (Ontario), las lupas americanas (Ney York) y las cataratas 'Velo de Novia', las más pequeñas. Esto provoca que sea un lugar de turismo compartido por la ciudad de Niágara Falls de Nueva York y la de Niágara Falls de Ontario.
Curiosidades:
- La palabra Niágara procede de un vocablo iroqués y significa “Trueno de agua”.
- A lo largo de la historia ha habido muchos momentos en los que diferentes personas han intentado saltar y cruzar las cataratas: en 1829 Sam Patch fue el primero en saltar las canadienses y no morir en el inteno. En 1901 Annie Taylor, a la edad de 63, no sólo las atravesó sino que lo hizo de lado a lado como bala humana. Otras 14 personas lo han intentado desde entonces y muchos no han sobrevivido para contarlo. El más reciente en conseguir tal hazaña ha sido el ilusionista David Copperfield, eso sí, multado después de hacerlo ya que es ilegal y, por lo tanto, está prohibido.
- Estas cataratas han sido escena y testigo de varias películas como 'Niágara' de la conocida Marilyn Monroe o 'Superman II'
- A la vez que pasas bajo las cataratas en barco puedes hacer un recorrido por diferentes puntos clave de la Guerra de 1812.
- Una visita a la española: el Spanish Aerocar, construido en 1916 gracias al diseño de Leonardo Torres Quevedo, es un cablecarril que lleva pasajeros desde el lado canadiense hasta debajo de las cataratas.