Uno de los lugares que mas llaman la atención cada vez que el mundo cambia de año es Times Square, en Nueva York.

Este año, 2016, empezó en Times Square con un despliegue de medidas de seguridad abrumador, y es que millones de turistas y estadounidenses acuden todos los años a esta calle para celebrar la llegada del año nuevo.

Es tradición en Nueva York contemplar como cae la gran bola de Times Square mientras el reloj se acerca a las doce de la noche.

Esta gran esfera mide 3,6 metros de diámetro y mesa cinco kilos y medio. Está diseñada por la compañía Waterford Crystal y todo los años operarios de la misma preparan sus triángulos luminosos para ponerla a punto para el gran acontecimiento. Esta tradición se mantiene desde el año 1907 y fue el director del periódico The New York Times quien encargó la construcción de la primera bola para celebrar el año nuevo.

El día de fin de año, a las seis de la tarde se eleva la bola a lo más alto del poste de Broadway con la calle 42. Después, a las 11.59, a un minuto de fin de año, la bola comienza a descender los 23 metros que mide el poste hasta la altura de la calle. Todos los presentes entonan una cuenta atrás al unísono que también representan las enormes pantallas digitales de los edificios de la zona. Cuando la bola llega hasta abajo, se enciende el cartel luminoso con el año 2016.

Cae una lluvia de confeti sobre los presentes y la multitud grita, aplaude y como es tradición en estados unidos: besan a sus parejas. Los estadounidenses se obsesionan además con encontrar a quién besar en año nuevo, ya que muchos creen que si nadie te besa esa noche tendrás que aguantar todo un año de soledad.

Al ser un evento gratuito, la multitud se amontona en la calle, y todo el mundo acude pronto para conseguir una buena vista. Unas doce horas antes, en algunos casos.

Este año los asistentes pudieron ver las actuaciones de Jessie J, Carrie Underwood, Demi Lovato, Luke Bryan o Maluma.


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