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ENE
2016
El temido nombre que reciben estos mamíferos proviene de su feroz manera de comer y de los agudos chillidos desagradables que emiten. Apodados “Diablos o Demonios de Tasmania” (país del que proceden), son el marsupial carnívoro más grande del mundo.
1. Antiguamente toda la especie estaba repartida a lo largo de todo el área del continente australiano, sin embargo, a consecuencia de la expansión aborigen y la extrañeza física que les caracteriza que llama tanto la atención del ser humano, hoy en día su población ha quedado reducida a la isla de Tasmania. En 1941 se inició un programa de protección de la especie en Australia que se mantiene hasta nuestros días.
2. Su imagen se asemeja a la de un perro pequeño. Mide unos 65 centímetros como mínimo y puede llegar a pesar 8 kilos. Un poco menos si es hembra. A pesar de esto, es un animal muy fuerte con una cabeza bastante grande si la comparamos con el resto del cuerpo a la que le acompaña un cuello robusto que le facilitan poder dar los mordiscos más grandes por unidad de peso de entre todos los depredadores del mundo.
3. No tengas miedo de cruzarte con alguno de ellos durante el día ya que exceptuando que se sientan atacados, evitarán el contacto físico, son animales nocturnos que solo cazan de noche, aún así, no dedican sus horas diurnas a dormir sino que en este horario también se mantienen activos. No les suele frenar nada, ya que son capaces de escalar árboles y montañas, nadar en los ríos o recorrer gran cantidad de kilómetros de distancia.
4. Como ya hemos dicho, son animales carnívoros por lo que su dieta consiste en la más amplia variedad de carne que pueda encontrar, esto por ejemplo, pescado, insectos, serpientes, anfibios e incluso restos de otro animal. Lo realmente anecdótico en este sentido es que se comen absolutamente todo, incluído los huesos e incluso se ha sabido que muchos de ellos entierran las sobras de una de sus “comidas” para poder comerselas en otra ocasión.
5. La reproducción de las hembras tiene un tiempo de gestación estimado en 3 semanas de la que sale una gran camada de unas 20 o 30 crías. Sin embargo, muchos de ellos mueren ya que su instinto depredador y su necesidad de alimentarse les deja insatisfecho puesta que la madre tan solo tiene 4 pezones para amamantar a todos ellos.
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