Introducción


York es una histórica ciudad fortificada del norte de Inglaterra, perteneciente al condado de Yorkshire del que es capital y en la que confluyen los ríos Ouse y Foss. York es una mezcla de pasado y presente: su historia, animado ambiente, oferta cultural y un pub en cada esquina, hacen de esta pequeña ciudad un lugar muy recomendable para aprender inglés en Inglaterra y embarcarte en un viaje al pasado. Se dice que York tiene 365 pubs, uno para cada noche, por lo que no te faltarán sitios para tomarte unas pintas. York tiene muchas atracciones turísticas, como son el Museo Vikingo o su impresionante catedral, The Minster, que es la catedral gótica más grande de Europa y que es todo un símbolo de la ciudad. Si te quieres enamorar de por vida, no te olvides de visitar la vidriera “Corazón de Yorkshire” y descubrir su fantástica leyenda.

Tampoco podrás dejar de visitar el Castillo de York (York Castle), un complejo de edificios que engloba desde la torre medieval de Clifford hasta la entrada del Museo del Castillo de York (convertido en prisión), que data del siglo XX y es una de las mayores atracciones de la ciudad. Su centro histórico está custodiado por sus murallas medievales, que mezclan partes de las antiguas murallas romana y normanda, además de las renovaciones que sufrieron en los siglos XIX y XX. El circuito completo consta de unos 4 kilómetros, lo que las convierte en un popular paseo. La calle medieval más famosa de York es Shambles, llena de tiendas, boutiques y teterías.

La ciudad fue fundada por los romanos y tiene más de 2.000 años de historia. Desde aquí, Septimio Severo gobernó todo el Imperio romano. Más tarde llegaron los anglosajones y en el 866, los vikingos tomaron la ciudad y la llamaron Jorvic. Ricardo II intentó convertir York en capital de Inglaterra, pero acabó siendo capital del norte.

En la Edad Media, York creció hasta convertirse en el mayor centro de comercialización de lana y en el siglo XIX, se convirtió en núcleo de la red de trenes, lo que aumentó su dinamismo. Aunque en los últimos años, el turismo se ha convertido en un elemento importante para la economía local.

York un destino con una herencia histórica apabullante, excelente para aprender la historia de Inglaterra y explorar los paisajes del típico countryside inglés mientras estudias en esta ciudad medieval rebosante de encanto.

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